La Senadora de Acción Nacional se expreso sobre el caso Paulette luego del estreno de la serie en Netflix.
La Senadora Lilly Téllez, quien ahora forma parte de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), insiste en que el cadáver de la niña Paulette Gebara Farah, desaparecida entre la noche del 21 de marzo y la mañana del 22 de marzo de 2010, no estaba en su cama, en donde fue encontrado la noche del 31 de marzo de ese año.
Uno de los personajes principales de la serie de Netflix es Carolina (Regina Blandón), una periodista que comienza a investigar el caso de Paulette al darse cuenta de que las autoridades están alterando la situación para encubrir a los responsables, pues es imposible que la niña apareciera en la misma cama donde días antes ella se había sentado para entrevistar a Lizzete Farah, mamá de la pequeña.
La serie de Netflix retrata el caso Paulette, en el que forma parte la Senador Lily Tellez. Hace diez años era reportera de TV Azteca.
Al ser una producción basada en un caso real, gracias a dicha entrevista nos damos cuenta de que el personaje de Regina Blandón encarna a la periodista Lilly Tellez, ahora senadora del Partido Acción Nacional (PAN), que hace 10 años y para TV Azteca habló con Lizette Farah en el cuarto de Paulette (específicamente en la cama de la habitación) y días antes de que la niña fuera hallada sin vida en ese mismo sitio.
Una entrevista que seguramente muchos recordarán y si no, la pueden ver a continuación:
El 25 de marzo de 2010, Lilly Téllez, quien trabajaba como periodista en TV Azteca, entrevistó a Lizzette Farah, madre de Paulette; las dos estuvieron sentadas en la cama de la pequeña.
El fragmento de esa entrevista fue dramatizado en la serie de Netflix a través del personaje de una periodista interpretado por la actriz Regina Blandón.
Dada la controversia causada por el show, Téllez utilizó sus redes sociales para insistir en su postura: “Me consta que el cadáver de Paulette no estaba ahí”.
Lilly Téllez también compartió una columna publicada en 2016 en la que asegura que el entonces subprocurador del Estado de México, Alfredo Castillo, sabe que el cadáver de Paulette “fue sembrado ahí; literamente metido con fuerza, ya rígido y descompuesto” en un espacio libre que quedaba entre la cama y el colchón en el que dormía la niña.
“Estuve sobre esa cama cuando Paulette llevaba 5 días muerta. Revisé la cama, toqué sus cobijas, acaricié los peluches, ayudé a arreglar la sobrecama para hacer la entrevista con la madre de la niña, sentadas sobre el colchón durante más de una hora”, escribió Téllez en aquella columna, “Estuve encerrada con su madre en esa habitación con el equipo de grabación y después a solas. No se percibía un mínimo mal olor. No existía una temperatura a nivel de congelación en esa habitación que evitara que el cuerpo, que llevaba cinco días en descomposición, despidiera ese olor a muerto que causa escalofríos y una especie de repugnancia indescriptible”.
En su artículo, la periodista aseguró que la madre de Paulette se movilizó para localizar a su hija, y que el padre, Mauricio Guebarah, era quien no quería que el caso tuviera más difusión.